Cuando un gato nace es un animal débil que necesita nuestros cuidados para salir adelante. Es esencial que les dediquemos tiempo y paciencia para asegurarnos de cubrir sus necesidades básicas como haría su madre: alimentación, limpieza, higiene y necesidad de contacto.

Lo primero que debemos hacer es colocar a los gatos recién nacidos en un espacio cerrado al abrigo de las corrientes de aire. En el interior de la cesta donde los coloquemos debe haber ropa y una bolsa de agua caliente para asegurarnos de que tengan la temperatura adecuada.

También es importante que los acariciemos suavemente, para que noten el contacto con nuestra piel y se sociabilicen. De esta manera, no crecerán siendo ni tímidos ni agresivos.

La alimentacion es otro de los cuidados principales que debemos dar a nuestro gato recién nacido. Es esencial que lo alimentemos siempre a la misma hora y en el mismo lugar y que le demos comida a temperatura ambiente. Lo ideal seria que les pudiésemos dar leche maternizada, para que noten lo mínimo posible la ausencia de su madre en su desarrollo.

Otra de las cosas que debemos hacer es ayudarles a defecar, ya que de tan pequeños no pueden hacerlo por si mismos. Solo tendremos que coger un algodón mojado con un poquito de agua tibia y dar un pequeño masaje sobre su ano.

Cuando nuestros cachorros cumplan un mes ya los podemos alimentar con comida sólida y enseñarles a usar la bandeja de deposiciones. A partir de los dos meses de edad ya podemos visitar el veterinario para iniciar un calendario de vacunaciones que deberá renovarse anualmente.

Fuente:mascotas.org