Los gatos son de los animales más limpios que nos podamos encontrar. Su gran inteligencia hace que aprendan a usar enseguida el arenero para hacer sus necesidades y que no dejen de ir a ella nunca. De hecho, si vemos que nuestra mascota deja de ir al arenero, debemos preocuparnos por los motivos que le llevan a hacerlo.
Hay diferentes causas que pueden provocar que un gato deje de recurrir a su arenero. Lo primero que debemos fijarnos es que no sufra ningún problema médico que haga que no pueda desplazarse hasta donde esté situada. También puede tener alguna enfermedad que aumente mucho sus deposiciones y por lo tanto no tenga tiempo de llegar hasta donde tiene la arena, como una diarrea o diabetes.
Otro motivo importante puede ser que no le guste compartir su bandeja con otro gato, ya que ellos necesitan encontrarla siempre limpia. Por lo tanto, puede ocurrir lo mismo si, simplemente, no les cambiamos la arena a menudo. Es mejor que se la limpiemos más a menudo de lo normal, que menos.
Otra causa muy común para que tu gato deje de usar el arenero para hacer sus necesidades es que le cambies la marca de la arena. Estos animales son muy ‘señores’ y notan cualquier alteración de manera muy rápida. Si entran en su bandeja y, por ejemplo, les molesta pisar la arena nueva ya no volverán a usarla hasta que les pongas una de su agrado. Por lo tanto, ten mucho cuidado con la marca que usas.
Fuente:mascotas.org